lunes, 24 de enero de 2011

La iniciativa la tomaste tù (carta de un acusado llamado Ismael)

Pablo Picasso / Mujer llorando
Ver cómo tus cartas (las que viniste a dejarme a mi casa, a pesar de mi petición de que te mantuvieras lejos) iban mostrando la degradación de tu pensamiento y de tu percepción me provoca... mmm... hueva.

En la primera (me percaté por las fechas, y por el seguimiento de los relatos) decías: "qué deliciosa travesura la del baño de Coyoacàn... esos besos, esas caricias, esa espontaneidad, esa manera de mirarme, esas manos, ese ritmo... ese desgarrarnos la ropa sin hablar, ese deseo infinito... esas ganas de ganarle a la luna el primer rayo de sol... viva la vida, viva el punto G y el orgasmo... Gracias por todo eso, pero espero aún más".

En la segunda te dio por hacerla veladamente de pedo, diciendo "esas cosas no se hacen, Ismael... ¿y tu novia?... ¿acaso no vas por el mundo dando lecciones de honestidad?... yo respeto la institución de la pareja, del noviazgo... ¿qué somos?"

Pa la tercera ya decías: "no vuelvo a ser parte de esto... no me vuelvo a degradar así, dejándome llevar por la pasión... eres tan egoísta, que sólo piensas en el placer... pero yo tengo otros valores, los familiares, los de la confianza... ¿y cómo crees que me siento al saber que mis amigos se percataron de mi affaire contigo, en un encierro de baño?... si mi madre bien me lo decía: ¡cuídate de los patanes que sólo quieren curvas, faldas y tacones, y no ven dentro del alma de una mujer!"

Ya en la cuarta comienzas a despedirte: "no, no quiero esto para mí. Valgo más que un agarrón de nalga. Soy una mujer completa, con cabeza y corazón. Tú y tu arrasante egoísmo, siempre. No, no quiero ser una más. Me niego a ser vista así por mí misma, mirarme al espejo y no poder fijar la mirada en mis propios ojos. No, perder el alma por el esclavo placer de la carne, no... no... aléjate de mi vida, Satanás"

Y en la quinta te liberas: "Que tengas una linda vida, hombre de plástico. Yo quiero ser una mujer completa y una madre joven, al lado de un hombre que me valore y me dé mi lugar... ojalá que la vida se encargue de hacerte ver que tu manera de vivir es frívola, que se basa en la pura búsqueda del placer, y nada más. Sin espiritualidad, sin compenetración, sin nada. Vacío, estás vacío. Suerte en tu camino de soledad y egoísmo... no cuentes más conmigo para tus prácticas de promiscuidad"

Bien. Por otro lado, mi versión de los hechos es la siguiente:

En la fiesta de disfraces, en tu casa de Coyoacàn, me sentí cansado a las seis de la madrugada y le dije a mi amigo Javier que ya nos largáramos. Mientras él se despedía de la banda, opté por adelantarme y bajé por la escalera para encaminarme a la puerta de salida. Acto seguido, te veo precipitarte corriendo hacia la planta baja en mi búsqueda para, sin decir más nada, abalanzarte a mis brazos y comerme a besos, haciéndome rodar por las paredes del vestíbulo de acceso a la cocina, y de ahí al baño de visitas.

Yo, ya ebrio, sólo hago que seguirte la corriente. Pero debemos ser honestos:

la iniciativa la tomaste tú,

así que asume la responsabilidad de las consecuencias. Si te pasaste de copas y te encerraste en el baño con un fulano a echar pasión, esa es bronca tuya. El fulano no te hacía en el planeta hasta que a ti te dio por alborotarle el miembro.